vista del Monumento Nacional Guayabo foto cortesía de Johnny Valverde Licencia CC - Autoría - No comercial |
El domingo pasado tuve la oportunidad de visitar el Monumento
Nacional Guayabo en excelente compañía.
La jornada empezó un madrugón de domingo (a las 7 en pie y con buen humor
:). Antes de salir protegí la totalidad de mis partes blancas expuestas al sol
con crema solar factor +50. El taxista que me llevó hasta el lugar de partida
era un dominicano creyente 100% y cantante de bachata y sones caribeños varios.
Lo reconozco me encandiló con sus historias varias y al final de la carrera le
compré un CD (Mireia ya sabes cuál va a ser tu regalo ;)
El camino en mini-autocar al lugar duró unas dos horas y algo. El paisaje
alternaba 100 tonalidades de verdes con colores vivos (azules, rosas e incluso
lilas) de las viviendas de una sola planta que bordeaban el camino. Aquí y allá
se dejaban caer unas vacas que pastaban en terrenos diagonales donde yo
difícilmente hubiese podido mantener el equilibrio (de estoy segura de que de
alguna de ellas es producto el queso Turrialba que hay
en mi nevera).
cartel situado en la taquilla del monumento... para que luego no digas que no estás avisad@ |
Tras un par de kilómetros de camino de tierra con boquetes de varios
centímetros de diámetro (que hacían imposible sorber el café sin que se te
derramase por encima… hecho que efectivamente me pasó) llegamos al Monumento
Nacional Guayabo. A decir verdad, el cartel de la entrada me tiró un poco "patrás" pero ya sabéis que una es valiente como la que más así que, me armé de valor y decidí afrontar con entereza a cualquier bicho que se cruzase en mi camino.
esferas de piedra fuente |
Nuestro guía Iván, profesor ya retirado, tenía ese brillo en
los ojos que solo los amantes de su profesión logran conversar con el paso de
las lunas. Nos explicó que… navegantes y
astrónomos eran profesiones sinónimas hace algunos cientos de años… que las
mujeres eran sabias respetadas… que el matriarcado era el régimen establecido…
que la nueva arqueología consiste en no excavarlo todo sino un pedazo de
terreno y el resto inferirlo a través de medios tecnológicos… que deberíamos
cuestionarnos, y mucho, si Colón descubrió América y qué descubrieron los
pueblos que habitaban Costa Rica… que las esferas de
piedra no simbolizaban la fuerza o la jerarquía de alguien sino que
constituían puntos clave para el establecimiento de coordenadas para navegar (aquí
van dos vídeos de Jiménez del Oso para ampliar conocimientos sobre las esferas:
vídeo 1 y vídeo 2)… que los
antiguos leían el mar a partir de su propia vivencia personal, etc. Con ese estoniano
de ojos vivarachos una podría pasarse horas escuchándole hablar de historias de
la humanidad pasadas, presentes y hasta futuras (os recomiendo que si visitáis
este país, lo busquéis y os apuntéis a alguna de las excursiones que guía, no
os defraudará).
Antes de salir, y como una quiere probarlo todo, por 500 colones le pedí al señor que me regalara una pipa (coco tierno) que fui sorbiendo durante un buen rato, feliz como una perdiz.
profesor Iván, la pipa y yo foto cortesía de Tatiana (¡GRACIAS! :) |
A la vuelta, paradas de
rigor para, por un lado, comprar quesos en el Rancho del Sapito (que a día apenas
conservan una cuarta parte de su esplendor y grosor) y, por otro lado, para
llenar la panza con algo sabroso en un ambiente 100% tico, en el Restaurante La
Cocina de Mi pueblo (que está en Capellades… pero de Costa Rica).
Con el sueño pisándome
las neuronas llegamos a San José. Un pequeño paseo por las tiendas del centro y
un taxista (esta vez un joven de 34 años con hijos de 16, 14 y 2,
respectivamente) que me contó la historia de sus últimos 20 años de vida.
Así, con la cabeza llena
de leyendas, saberes, retazos de vida de otr@s, esferas, ritos, calzadas que
llevaban y llevan hacia regiones del ayer transformadas por el viento de los
años, sabores típicos, risas y diálogos compartidos, fotografías para soldar
recuerdos, y un sinfín de chunches
varios en mi cabeza me dispuse a disfrutar de un sueño reparador para iniciar
una semana de stress-yourself.
¡¡¡GRACIAS JOHNNY Y TATIANA POR ESTE VIAJE AL PASADO EN EL MÁS VÍVIDO PRESENTE!!!
¡¡¡GRACIAS JOHNNY Y TATIANA POR ESTE VIAJE AL PASADO EN EL MÁS VÍVIDO PRESENTE!!!
Tatiana y Johnny unos acompañantes de bandera :D |